Los orígenes
Desde 1961, bajo resolución ministerial N° 1709, la “Escuela de pesca y arte naval, dictaba los cursos: Patrón de pesca de altura y conductor de motores, cada curso duraba 2 años.
La institución funcionó en el edificio ubicado en calle Acha y 12 de Octubre en el Puerto hasta el año 1972.
La escuela abrió nuevamente sus puertas el 26 de Marzo de 1973 con el nombre de "Centro de capacitación de adultos para patrones de buques pesqueros”; dependiente del Ministerio de
Educación de la Provincia de Buenos Aires.; en calle Rivadavia, entre 14 de Julio y Dorrego en el centro de Mar del Plata. En el año 1977 la escuela paso a estar a cargo de la
Dirección de Instrucción Naval; nombrándola: Escuela Nacional de Pesca "Comandante Luis Piedra Buena" .
La Escuela depende hoy de la Dirección General de Educación de la Armada, es la única de su tipo en el país y en Latinoamérica, y junto a la Escuela Nacional de Náutica y la Escuela
Nacional Fluvial, forma al personal de la Marina Mercante. Dedicada a la formación y capacitación del personal de la Marina Mercante que tripula la Flota Pesquera. Su primer Director
fue el Capitán de Corbeta (RE) Alfonso David Giavedoni, con un cuerpo docente acotado. En sus inicios, se abrió como un Centro de Formación Profesional, donde se dictaban los cursos de
Patrón de Pesca Costera y posteriormente se incorporó Patrón de Pesca de Segunda, ambos de un cuatrimestre. En 1981, estando vigente el "Convenio de Cooperación Técnica" con el
Gobierno de Japón, Argentina solicitó que se evaluara la posibilidad de donar un nuevo edificio para la ESNP, realizándose, en diciembre de 1983, el intercambio de Notas Reversales por
las cuales Japón se comprometió a la donación del edificio, todo su equipamiento didáctico y un buque de instrucción pesquera.
El nuevo edificio
Dos años después, en mayo de 1985, se produjo la inauguración oficial del nuevo edificio, que fue presidido por el entonces Presidente de la Nación Doctor Raúl Ricardo Alfonsín, quién visitó las instalaciones y recorrió su moderno equipamiento.
Además del equipamiento didáctico instalado en el edificio la escuela cuenta desde entonces con un Buque de Instrucción Pesquera (B.I.P.). El B.I.P. ARA "LUISITO", es un pesquero de arrastre, construido en fibra de vidrio reforzada, posee 19 metros de eslora, 4,10 metros de manga, un calado de 1,50 metros y un desplazamiento de 22 toneladas. Se propulsa con un motor principal de 300 HP, alcanzando una velocidad máxima de 9 nudos. Está equipada con dos redes de arrastre y puede embarcar hasta 20 alumnos.
Su nombre fue elegido en homenaje a la embarcación construida por el comandante Luis Piedra Buena en la Isla de los Estados, con los restos del Bergantín Espora, destruido en 1873 por un temporal, en dicha zona geográfica.
La escuela se había transformado enormemente, en un edificio de 6500 m2 de superficie cubierta. Ahora tenía aulas para 24 alumnos cómodamente sentados, televisores para pasar videos en clase y hasta un “pizarrón mágico” que hacía fotocopias de lo que se dibujaba.
Sin prisa, casi en silencio, fueron naciendo nuevos cursos y llegando nuevos alumnos y la Escuela Nacional de Pesca se insertó en un proceso de crecimiento sostenido que la ubica, aún hoy, entre las instituciones más destacadas de América Latina.
Simultáneamente, dentro del marco de la notable cooperación, un grupo de asesores y expertos japoneses, realizaron la transferencia de conocimientos tecnológicos. Dicho asesoramiento tuvo una duración de cinco años y abarcó varios campos: Tecnología Pesquera, Artes de Pesca, Equipos Electrónicos de Navegación y Pesca y Ayudas Audiovisuales. La cooperación se complementó con un plan de becas que incluían el envío de profesores y personal directivo de la Escuela al Japón, tendiente a lograr un mayor perfeccionamiento.
Su ubicación está enclavada en el Puerto de Mar del Plata, por lo cual es importante reconocer la cooperación de la autoridad portuaria, al permitir su construcción.
Para su edificación, que se realizó en un lapso de 365 días, los materiales llegaron en su mayoría en contenedores a bordo de buques mercantes, al igual que el equipamiento, y el buque de instrucción, que llegó sobre tapas de bodega de un barco carguero. Y un dato importante es, que la entrada de la Escuela, debía mirar hacia el mar, por eso su ingreso no está ubicado sobre la avenida principal, sino, en dirección Este, hacia donde sale el sol, o como se expresa en el significado de la palabra Japón, “sol naciente”, que hace referencia al surgimiento, o la creación.
El proyecto incluía cinco años de presencia de un contingente de expertos japoneses en la escuela, por lo cual se crearon cuatro áreas de colaboración y transferencia de tecnología: Artes De Pesca, Tecnología Pesquera, Equipos Electrónicos De Navegación y Pesca y Audiovisuales. Los docentes nombrados como contrapartes, y algún otro personal técnico y de gestión, pudieron ir a Japón con planes personalizados de visitas y cursos para sus especialidades, y así, realizar la transferencia de conocimiento que permitiera asegurar el éxito del Convenio.
En la actualidad
La ESNP pudo renovarse ampliando su oferta educativa, incluyendo cursos desde Marinero hasta Capitán de Pesca, con récord de matrícula, egresando, en 2018, la primera Capitán de Pesca del país, la señora Nancy Jaramillo. Favoreciendo también la incorporación de la mujer en el ámbito pesquero, que se inserta de manera lenta y gradual.
Cabe destacar que, también, la escuela dictó dos cursos presenciales con profesores itinerantes en Playa Unión, Rawson, durante 2005 y 2006, para Patrón de Pesca Menor.
En cuanto a la relación con Japón, y su generosa colaboración con Argentina, en marzo del 2020, la escuela recibió la visita del Embajador del Japón, Nakamae Takahiro, acompañado del Cónsul Furukawa Yoshikazu y el Vicepresidente de la Asociación Japonesa de Mar del Plata Araki Adrián. En esta ocasión, el Embajador resaltó el buen estado de las instalaciones de la ESNP y agradeció a sus autoridades por mantener la misión de formar y capacitar al personal de la Marina Mercante y brindarles los conocimientos y herramientas, a fin de tripular los buques destinados a la pesca marítima.
Por sus aulas pasan anualmente centenares de alumnos, no solo aquellos que realizan los cursos regulares de formación, sino también, quienes se capacitan en los requerimientos establecidos por la Organización Marítima Internacional (OMI) y el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM). Y cuenta con un plantel docente de medio centenar de profesores especializados y de gran experiencia en cada área específica, pudiendo armar equipos interdisciplinarios de trabajo, que enriquecen el proceso de enseñanza-aprendizaje.
En cuanto a sus instalaciones, actualmente posee Simulador de Navegación y Maniobra, de Comunicaciones, Aula Taller de Primeros Auxilios, Taller de Electricidad y Máquinas, Laboratorio de Tecnología Pesquera, Patio de Fuego para ejercicios de lucha contra incendios y control de averías y Taller de Artes de Pesca. Además, cuenta con la una biblioteca especializada que brinda apoyo a la enseñanza, y lleva el nombre “Buque Pesquero Angelito y Amapola”, en honor a dos buques pesqueros que naufragaron; y una pequeña sala histórica, que atesora los orígenes de la institución en relación a la ciudad donde está apostada, inaugurada en junio de 2018.
En 2020, frente a la Situación de Emergencia Sanitaria Mundial por Covid 19, la actividad educativa continuó, de forma ininterrumpida, mediante el campus virtual de la escuela, brindando la totalidad de los contenidos teóricos, restando únicamente las evaluaciones finales teóricas y las actividades que permiten acreditar las competencias.
De esta manera, con la presencia de la ESNP, ubicada en la ciudad costera por excelencia, e inserta en un polo industrial pesquero, Argentina cuenta con una institución construida para formar al personal de la pesca exclusivamente, lo que no ocurre en el resto de los países.
